Prensa Senado (27-08-10).- El Vicepresidente del Estado Plurinacional, Álvaro García Linera, informó el viernes que los trabajadores mineros del país aceptaron el Proyecto de Ley de Pensiones trabajado por el Gobierno y que los puntos pendientes en desacuerdo se continuarán consensuando con los involucrados para que la propuesta ingrese a la Asamblea Legislativa en el mes de septiembre.
“El tema importante que quería transmitir a los bolivianos es la aceptación que ha hecho el ampliado minero a la propuesta sobre Ley de Pensiones que tiene el Gobierno y que está construyendo conjuntamente con los trabajadores. Ciertamente hay un punto en disenso, lo seguiremos debatiendo en las reuniones con el resto de los trabajadores de la COB”, puntualizó.
El mandatario boliviano recibió en Palacio quemado a la delegación de 38 trabajadores mineros de los departamentos de Potosí, Oruro, La Paz y Cochabamba, además a la delegación de las centrales obreras departamentales de Oruro y Potosí.
Pasada la reunión, García Linera en conferencia de prensa explicó que la propuesta de pensiones del Gobierno es de carácter universal, es decir, para todos los bolivianos y bolivianas, ya no solamente para el 20 por ciento de los asalariados como hasta ahora.
“Es un Proyecto que combina el ahorro individual con el aporte solidario, que, fundamentalmente, garantiza que los que no tenían rentas anteriormente ahora reciban y los que recibían muy poco ahora puedan incrementar”, mencionó.
La norma plantea que todas las personas recibirán una renta mayor a 1.200 ó 1.400 bolivianos, sostenida con el Fondo Solidario, que la misma se construye con un pequeño aporte razonable especialmente de los trabajadores que ganan más de 13 ó 14 mil bolivianos, que apoya a los trabajadores que ganan menos y aportan menos.
“Para el salario de todas las personas, independiente de su nivel salarial, hay un aporte mínimo de un 0,5 por ciento para el fondo solidario, que va a servir para mejorar la renta de los que ganan menos que son la mayoría de los bolivianos, pero las personas que tienen un salario mayor de 13 ó 14 mil bolivianos deben colocar un porcentaje pequeño”.
Recordó que en tiempos neoliberales sólo el trabajador aportaba y el dueño de la empresa no, con la nueva propuesta gubernamental se prevé el aporte patronal de al menos un 3 por ciento y en el caso de los mineros hasta un 5 por ciento para mejorar la renta.
La edad de jubilación baja de 60 a 58 años y 56 en el caso de los mineros, y en el tema de las mujeres “por cada niño que acrediten pueden bajar un año por hijo hasta un máximo de tres hijos”.
Aclaró que el modelo tripartito europeo –aporte estatal, patronal y laboral- no funciona en Bolivia, ya que es sólo para una sociedad plenamente asalariada. En el caso de nuestro país excluiría a gran parte de los trabajadores, como lo hizo anteriormente.
Explicó que eso no significa que el Estado no aporte, en el nuevo modelo boliviano si existe el aporte estatal, con la diferencia de que no solamente es para los asalariados sino también para el resto de los trabajadores como la Renta Dignidad que puede mejorar los siguientes años. Además, específicamente en el caso de los trabajadores asalariados del país, el Estado contrata a casi al 50 por ciento.
Finalmente, el mandatario dijo que por mandato de la CPE, el Estado asume la administración de pensiones a través una institución autónoma.
“La función de los fondos de pensiones los asume el Estado, pero también, como fondo de pensiones, seguirán existiendo los fondos de pensiones, solamente ahora bajo control y propiedad estatal. La gestión es estatal y administración pudiera ser subcontratada, es una posibilidad abierta, en todo caso, la Constitución establece que el control de los fondos de pensiones son del Estado”, concluyó.
Juan
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